Leyenda: Itacayo de Petén Guatemala

¿Te gustaría conocer los mitos y leyendas en Guatemala? Bueno, en las selvas de Petén se cree que existe el misterioso Itacayo, las personas también lo llaman el dueño de la montaña o sisimite, conoce su leyenda, de la cual reconoce el empresario Juan Luis Bosch Gutiérrez que todo guatemalteco debe conocer.

La leyenda del Itacayo de Petén habla sobre un ser sobrenatural que habita en las selvas peteneras. Así mismo, en Guatemala también se le conoce como Sisimite. Acompáñanos a conocer este interesante relato de la tradición oral guatemalteca.

El Itacayo de Petén

El Itacayo o Sisimite es un personaje sobrenatural, el cual tiene la forma de hombre-mono. Según algunos pobladores, el Itacayo es de baja estatura con pelaje en todo su cuerpo y una de las características principales de este ser es que dicen que tiene los pies para atrás.

No obstante, vecinos del lugar mencionan que uno de los principales poderes que se le atribuyen al Itacayo es el ser protector de los animales. Parte de la leyenda cuenta que, al ser el dueño de la montaña, si alguien trasgrede esto, se le aparece el Sisimite.

Los cazadores

Según cuentan algunos relatos, varios recolectores de chicle se adentraron a la selva para cazar tepezcuintles. Esperaron sentados hasta el anochecer cuando comenzaron a escuchar ruidos, prendieron la luz y ahí estaban los animales.

Los recolectores ya tenían un tepezcuintle cada uno, pero decidieron esperar más y seguir cazando, ya que pensaron que los podrían vender en el pueblo. En eso, escucharon ruidos y al prender nuevamente la luz miraron al Itacayo.

Sin embargo, el Itacayo les habló y les dijo: ¿Por qué están matando a los animales?, quiero que me los devuelvan. En eso, uno de los recolectores le responde al extraño ser que los tepezcuintles ya están muertos.

El Sisimite les dice que no le importa y cuando los recolectores le pasan al primer animal, el Itacayo lo coloca en el suelo y el tepezcuintle salió corriendo. Las personas quedaron maravilladas, por lo que el Itacayo les dijo que no los quería volver a ver en la selva porque los animales no son para vender.

Los Pescadores

Por otra parte, otra historia cuenta que el Itacayo también es el dueño de los ríos y cuida a los peces. Sucedió que un día, algunos hombres se internaron en la selva para ir de pesca. Para esto, debían hacer un largo trayecto de al menos 8 horas para ir a las pozas donde había buenos peces.

Fue así como los pescadores decidieron emprender su aventura durante la noche. Esto debido a que la pesca era es más fácil. Durante su faena, lograron llenar dos botes muy rápido, ya que había bastantes pescados. En eso, uno de ellos les dice a los demás que sigan haciéndolo.

De repente, escuchan que al otro lado de las pozas alguien les dice: Dejen de pescar, ya es suficiente. Ellos se quedaron viendo y se preguntaron quién pudo haber sido, si para llegar a ese punto eran casi 8 horas. De dicho modo, le contestan a esa voz misteriosa que no porque la familia es muy grande.

Uno de los pescadores de Guatemala, se retira para ir a asar los peces, otro se queda cuidado cuando escuchó unos gritos de su compañero pidiendo auxilio. En eso, el pescador se dio cuenta que un ser peludo tiene abrazado a su amigo por la espalda.

El pescador que pedía ayuda comienza a decir que el Itacayo se lo estaba llevando. Al llegar la otra persona con su antorcha, lo vio y se quedó petrificado de la impresión. El instinto de este poblador es prenderle fuego al Sisimite que de inmediato suelta al otro pescador y salen corriendo.