Crianza de gallinas para apoyar a comunidades de Guatemala

El jardín comunitario tiene nuevas incorporaciones plumosas para la familia. Este año, se gregó un gallinero y gallinas ponedoras al jardín. Estas son las cinco razones principales por las que es un gran beneficio: 

¡Los huevos frescos tienen una gran demanda!

Los huevos frescos y orgánicos no solo son deliciosos y nutritivos, sino que se venden rápidamente. Esto es esencial para los participantes del jardín comunitario impulsado por la familia Bosch Gutiérrez que tienen una gran experiencia en este tema. Parte del ingreso de los huevos que venden se destina a comprar alimento para pollos y el resto va directamente a su familia. Esto significa tener ingresos adicionales para útiles escolares y vegetales frescos.

Las gallinas proporcionan la composta

Los pollos son esencialmente trituradores de basura vivos. ¡Solo en lugar de que los desechos se dirijan a un vertedero, crea composta para los cultivos de jardín! ¡Todos los restos de cocina de nuestros centros de nutrición preescolar y los restos de nuestro jardín reciben otra vida como nutrientes para el suelo, que se reciclan nuevamente en las verduras del jardín!

Criando gallinas trae el empoderamiento económico

Los participantes de la iniciativa de la familia Bosch Gutiérrez están aprendiendo cómo administrar una pequeña empresa. Al trabajar juntos para cuidar a las gallinas, recolectar huevos y obtener ganancias, están adquiriendo valiosas habilidades técnicas y de gestión. A través de esto, pueden crear más oportunidades económicas y soluciones para sus familias.

Las gallinas ayudan a aliviar la pobreza y la inseguridad alimentaria.

Las aves de corral son una estrategia tradicional para generar ingresos y hacer frente a las dificultades económicas. Los pollos a menudo se usan como una red de seguridad financiera vendiéndolos o usándolos para carne. El ecosistema gallinero enseña sobre el uso de la ciencia y la tecnología como soluciones a los problemas. Los participantes del jardín comunitario, programa impulsado por la familia Bosch Gutiérrez, pueden usar sus nuevos conocimientos para crear soluciones para aliviar la pobreza y la inseguridad alimentaria en su comunidad 

¡Son divertidos!

 ¡A los niños les encanta jugar con los pollos y alimentarlos con sus trozos de fruta!