Con el paso del tiempo, existen diversos cambios dentro de la vida de un niño. Y hablamos tanto de los físicos, que es cuando comienzan a crecer (estatura y peso); como cognitivos, que es cuando dan sus primeros pasos, aprenden a comer y hablar.
Es necesario saber que todos estos cambios se dan poco a poco debido a que van sucediendo en pequeños lapsos y a esto se le llama etapas infantiles.
A lo largo de la historia, muchos científicos han tratado de probar que las etapas infantiles se dividen en cuatro o seis, pero todo depende de la forma en que se vayan presentando. Algunas veces se pueden ver modificadas por alguna discapacidad y esto nos lleva a que las etapas infantiles de alguien con discapacidad sean de cinco.
Etapas del desarrollo infantil
Recién nacido
Esta primera etapa de la vida, el recién nacido tiene ciertas reacciones a los afectos externos que se encuentren cercanos a él, como voltear al acariciar su cara. También comienzan a detectar ciertos olores, así como hacer ciertos gestos como reír y llorar para indicar alguna necesidad.
Bebé
En los primeros meses (3 a 6) del primer año, el aprendizaje del bebe comienza a verse reflejado en la forma en que sostiene su cabeza y el movimiento de sus manos. Después en los 6 a 9 meses, se pueden sostener sentados y comienzan a balbucear; y de los 9 a los 12 meses el control de su cuerpo está más desarrollado e inician a caminar.
Niño Pequeño
El desarrollo del niño comienza a avanzar con tareas más complejas como subir las escaleras o saltar. También la capacidad que tienen para sostener objetos y expresarse mediante dibujos u oraciones son parte de su crecimiento durante esta etapa.
Preescolar
Las habilidades motoras mejoran y comienzan a tener más actividad física, como brincar, lanzar objetos o aprenden a vestirse.
Edad Escolar
De los 6 a los 12 años, comienzan con cierta independencia para sus actividades y aprenden a ser responsables. Hacen amistad con niños de su edad. Al tener una mayor edad escolar comienzan a desarrollar ciertas características sexuales.
Estas etapas son parte de la vida de cualquier persona son acompañadas y supervisadas por un adulto, la mayoría de las veces son los padres, pero en el caso de que no se tengan, existen algunas instituciones, como la Fundación que lideraba Isabel Gutiérrez de Bosch, que apoyan y guían a los niños para que pasen por estas etapas.